Si llegaste hasta acá, es porque te importa lo que llevás puesto.
Y mejor que lo cuides: cada prenda está diseñada y producida con atención real.
Antes de lavar, dale la vuelta. Siempre.
Lavar la prenda del revés ayuda a preservar el print, el color y el tejido.
Nada de agua caliente.
Lavá con agua fría o temperatura ambiente. Las altas temperaturas desgastan más rápidamente el textil.
El secado, natural. Dejá que respire.
Secá tu prenda colgada a la sombra, sin sol directo.
No secarropas. No centrifugados. No “yo la cuelgo en la estufa y ya fue”, eso arruina los hilos de las costuras.
Planchado, sólo si sos de esos raros.
Y si lo hacés, que sea del revés y a temperatura baja.
Las prendas oversize envejecen bien.
No les tengas miedo al desgaste: cuentan historias.
Solo cuidalas lo justo para que no se mueran antes de tiempo.
Gracias por elegir vestir diferente.
Gracias por cuidar lo que hacemos con tanto detalle.
drøp.